DISPERSOS EN LUCHAS Y OTROS ACUMULAN


 
DISPERSION SOCIAL…acumulacion económica
                                                                                    
  Lic Carlos A Salgado Gòmez
                                                                                                 
 Periodista

En medio siglo transcurrido en Nicaragua, hemos transcurrido una historia topando con 2017, llena de muchas movilizaciones sociales, muchas luchas sindicales, banderas gfremiales alzadas y rumbos políticos donde los personajes evidentes fueron rutas políticas merecidos unos, reclamado por otros sin tomar al pueblo como sujetos de esos cambios.
 
  En este medio siglo transcurrido, principalmente a partir de  1960 iniciò una epòca de cambios económicos, frenados por ambiciones de la dinastìa de los Somozas, sus descendientes, que no sòlo debió reprimir luchas, exterminar físicamente ideales ò remitirlo al exilio nada dorado.
 
   El fin fuè, apropiarse de bienes, confiscar bienes extranjeros ò de inmigrantes caso de los alemanes, bajo la justificación de combatir al fascismo, al final nada de estabilidad, por ende ausencia de tranquilidad económica, por ende desordenes o acomodo social al régimen somocista qu irrumpió en la década de los 30.
 
  La acumulación de capitales iniciò compitiendo con la herencia de ocupación e intervención gringa, y surgió también de alternativa política de conservadores, bajo un acto político de apariencia liberal encarnada en los somozas, que en vez de “dejad hacer . dejad pasar” instalò obstáculo, los mismos Somozas.
 
   Este hecho político de los somozas ocasionò  desarrollo y louchas sindicales, presiones gremiales, búsqueda de espacios y hegemonía, dònde el resultado fue dispersión social, acomodos de necesidades a lealtades políticas y la urgencia de transformar la economía y una reingienerìa del Estado, cuyo objetivo no lo compartìa Somoza y herederos, creìan firme “El Estado era la dinastìa”
 
Transformar la agro-exportaciòn del Añil al café, ir a la ganadería de extensión, pasar por el cultivo del algodón y junto a ello Navieras, aerolíneas, industria de cemento y compartir el dominio de servicios, entre ellos transporte, implicò màs empleo, pero màs presión social de los que no encajaban en las lealtades al somocismo y llevaron al capital creciente a ser también financiero a buscar salidas al somocismo.
 
  La conclusión fue la llegada del FSLN al poder, derrocar a ,los Somozas, generar esperanzas en la década de los 80, presiones y chantejes norteamericanos, exilio de capitales y un reacomodo en los 90 con la llegada de Violeta Barrios, seguido de Arnoldo Alemàn y Enrique Bolaños, dònde la democracia fue palabra, no hecho y el neo-liberalismo vendió esperanza y su conclusión màs miseria t descredito político.
 
Hoy, tenemos una clase empresarial y un sistema financiero sujeto a los tentáculos del neo-liberalismo, los trabajadores son transformado en “colaboradores, demandar empleo, es minimizado y claman porque sean “emprendedores” y que la dispersión social, sea al padre nuestro de estos días.
 
Una sola cosa es real, acumular capital no es malo, tampoco arminizar tu desarrollo familiar con la banca, hoy la tarjetas de créditos abundan, pero bloquear aspiraciones por altos intereses, deja problemas jurídicos, quiebras y bancarrotas y desesperanzas que están dispersas socialmente, pero golpeadas por el sistema del capitalismo salvaje que hablaba  el ahora Santo Juan Pablo Segundo.
 
  Es hora de modernizar las realidades y buscar que todos seamos de la filosofía “ganar-ganar”, no la “ganadorers y perdedores”. Seguir despersando socialmente, nos lleva a la narquìa y no coincide con el objetvo de crecer con humanismo, acumular para el desarrollo e inversión, no  es bueno creer que explotación, es la llave  del crecimiento económico y recordar que crecer , no es lo mismo que desarrollo de una nación.
 
 
 
 
 

Carlos Salgado. les invita a debatir, platicar y entendernos

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